En 2012, Olivewood Gardens and Learning Center comenzó a organizar Cooking for Salud® – una clase de educación sobre nutrición y modificación del comportamiento diseñada para enseñar a los participantes cómo hacer cambios saludables en el estilo de vida. Aquellos que completan, o se gradúan, de Cooking for Salud obtienen el título de “Kitchenista.” En Julio de 2021, se graduaron las clases 19 y 20, también llamadas “Generaciones,” lo que eleva el total de Kitchenistas hasta la fecha a más de 300.
Patty Corona, coordinadora de Cooking for Salud y Kitchenista de la Generación 1, y Monica Lim, coordinadora de contabilidad a tiempo parcial y Kitchenista de la Generación 10, explican cómo ha side nutrir cuerpos y almas durante case una década:
De la Salud Alimentaria a la Salud Integral
Hace nueve años, sentimos que la amada National City no era el lugar más saludable para vivir. Nuestra comunidad tenía altos índices de obesidad, presión arterial y colesterol, lo que era especialmente cierto para los miembros de nuestra comunidad latina, que representan más del 60% de la población. Mirando hacia atrás, los supermercados en National City se veían diferentes: casi no había opciones de alimentos frescos y acceder a ellos era casi imposible. Asimismo, había una falta de información en la comunidad sobre cómo cocinar comidas saludables.
La solución a esta crisis sanitaria empezó por los niños. Venían a Olivewood Gardens and Learning Center para excursiones, aprendían recetas saludables y luego volvían a casa para contárselo a sus padres. Pero, cuando los niños querían practicar lo que habían aprendido, sus padres a menudo no podían entender las instrucciones en inglés. Se encontaron preguntándose: “¿Cómo puedo aprender esto también?” Un educador de nutrición de Olivewood en ese momento aprendió estos comentarios de la comunidad y comenzó a diseñar un programa que tenía como objetivo enseñar a los adultos cómo ellos también pueden crear recetas saludables. Este fue el momento que desencadenó Cooking for Salud.
Un Kitchenista es alguien que aprende las recetas y las habilidades y luego está listo para ingresar a la comunidad y compartir lo que aprendió. Un Kitchenista, como lo imaginamos, sería una persona que pasa por el programa Cooking for Salud y luego comparte sus conocimientos con sus seres queridos.
Entonces sucedió algo interesante. Empezamos a pedir a los Kitchenistas que compartieran sus experiencias y descubrimos que la mayoría tenía miedo de hablar en público. No sabían cómo hacerlo, así que simplemente comenzamos a enseñarlo. A lo largo de los años, exploramos muchas habilidades nuevas: artes y manualidades, consejos para el bienestar físico y mental, capacitación en defensa y más. De repente, los Kitchenistas empezaron a sentirse como un grupo de apoyo que iba más allá de Cooking for Salud. Cuanto más nos vinculamos y entendíamos las necesidades de nuestra comunidad, más nos dimos cuenta de que las personas estaban pasando por diferentes desafíos además de querer cocinar mejor. Querían ser más saludables, más sabios y convertirse en líderes, pero no tenían los recursos. Pasamos de la salud alimentaria a la salud integral, encontrando aún mayor importancia en alimentar tu alma y tu corazón.
Historias que nos Enorgullecen
“Además de aprender a cocinar sano, he ganado confianza para hablar en público y una mayor conciencia ambiental. También hay mucho más: cómo conectarme con mi comunidad y cómo mi familia y yo podemos valorar nuestra cultura mexicana. Tuve una gran experiencia y, en particular, disfruté de nuestro club de lectura, que me enseñó a apreciar mi cultura, especialmente durante la pandemia de COVID-19.” -Leticia Sanchez, 16.º Generación
Continuando la Misión
Hoy, es muy especial saber que hemos graduado 21 generaciones y 325 Kitchenistas. Hemos abarcado tantos años y hemos visto a Kitchenistas convertirse en todo, desde agentes comunitarios hasta funcionarios electos y empresarios.
Incluso han creado dos documentales basados en sus experiencias, The Kitchenistas y The Kitchenistas of National City.
Cada generación de Kitchenistas ha brindado más oportunidades a más personas. Se ha convertido en un legado: cada generación transmite historias, recetas y habilidades a la siguiente.
Pero no estamos esperando a envejecer para solidificar este legado. Este programa es algo que realmente se ha transmitido de generación en generación y tenemos la intención de mantenerlo.
Para la próxima década, esperamos ver a cada Kitchenista llevar una vida más saludables, ganar salarios justos y continuar haciendo crecer a sus familias. Esperamos que puedan evitar hacer los mismos sacrificios que hicimos nosotros, como madres y líderes.
Los Kitchenistas necesitan seguir creciendo. Así que esperamos que el mensaje de una vida saludable llegue a las comunidades más allá de National City. Instamos a las generaciones más jóvenes a tomar el mensaje sagrado y compartirlo. Eso es lo que continuará la misión: estar sanos en cuerpo y mente, y asegurarnos de que auienes nos rodean también estén completamente sanos.
